En primer lugar este mes te enseñamos a librarte de los dolores de cabeza, que día a día nos acompañan, con la "vuelta al cole". La acupuntura consigue reducir a la mitad los dolores de cabeza con unas cuantas sesiones, y sus efectos, los notarás durante meses.
Ante todo, lo mejor para el dolor de cabeza es hacer todo lo posible para evitarlo, la acupuntura los alivia, pero sabemos que la mejor medicina y la más efectiva es la prevención. Tan sólo hemos de seguir unas pequeñas pautas diarias, simples pero a la larga muy efectivas y que hacen de nuestros días fuente de bienestar, como es la relajación, la calma, el tomarse la vida con más tranquilidad y frenar.
La causa más importante de los dolores de cabeza es el estrés, y aunque no se pueda evitar el ajetreo que nos rodea, se puede conseguir que nos pase de lado, y que nos afecte lo menos posible. Tómate un baño relajante al volver del trabajo, el agua caliente obra milagros…
Un buen masaje es una de las mejores opciones contra el estrés pos-vacaciones, o cualquier terapia acuática, yoga, shiatsu, algo de ejercicio... En el agua nos sentimos más leves también porque dejamos fuera las preocupaciones y los dolores. Ahora que hemos de enfrentarnos a la rutina del estrés es el mejor y más necesario momento de cuidarnos, septiembre pondrá a prueba nuestros nervios, aunque afortunadamente existen muchas opciones para conseguir bienestar.
La base de cualquier persona saludable es una buena dieta, la "medicina afectiva" nos habla de que la alimentación puede prevenir y aliviar dolencias tanto físicas como mentales. Esta rama de la medicina natural afirma que algunos alimentos tienen propiedades para combatir diferentes estados de ánimo, debido a la teoría de que los neurotransmisores del cerebro que regulan el comportamiento dependen de lo que comemos.
Por ello estudian cómo algunos nutrientes pueden influir en la bioquímica de la actividad cerebral, como son la vitamina C, el ácido fólico, el calcio, hierro, magnesio…, que se deben incluir en la dieta cuando se cae en una depresión, los cuales se encuentran sobre todo en las espinacas, el ajo, las zanahorias y los pimientos. Cuando el problema es el estrés, necesitamos más que nunca magnesio, zinc, cromo y vitamina C, así que hemos de aumentar el consumo de alimentos como cítricos, perejil y zanahoria.