¿Te imaginas tumbarte en la cabina de un centro de belleza, elegir tu música y aromas favoritos y dejar que te mimen y masajeen rostro, cuello y escote y que salgas una hora después como si hubieras vuelto del Caribe? Piensa en alguien a quien ames y que necesite de ese momento, y no te quitará de su cabeza en toda su vida. ¡Sé la santavalentina que regale vitamina!
Santavalentina: un protocolo para perder el sentido
» El primer paso al entrar en la cabina será elegir la música y el aroma que quieres que gobierne la sesión. Cierra los ojos y prepárate para 60 minutos de auténtica desconexión en los que lo único que se te pedirá es que disfrutes con la mente a cero.
» El guión comienza con la limpieza cutánea con nuestra leche limpiadora de la línea Adapta, con activos calmantes que te prepararán para tu estado zen. Le sigue un peeling muy suavecito, casi imperceptible, a base de esferas de aceite de melocotón. "Es un gommage que se deshace él solo al extenderlo con los dedos, no hay que retirarlo", explica Sandra Pulido, esteticista de Ángela Navarro.
Piensa en alguien a quien ames y que necesite de ese momento, y no te quitará de su cabeza en toda su vida. ¡Sé la santavalentina que regale vitamina!.» Con la piel bien limpia y oxigenada, este protocolo, creado especialmente para el mes de febrero, incorpora la tecnología Indiba, "pero en lugar de aplicar el programa de regeneración profunda, hacemos una estimulación sanguínea, que es algo más superficial, pero muy tonificante", argumenta la experta.
» Para finalizar, se aplica el tratamiento de vitamina C con la ayuda de un masaje de 15 minutos que se va a centrar en las zonas más conflictivas como la ojera, el contorno de ojos y el cuello. Y se remata con una mascarilla de vitamina C que se eliminará después de un plazo de exposición de 10 minutos con agua y nuestro tónico de agua termal de Adapta.