6 ideas para un picote saludable, para disfrutar en nuestras jornadas maratonianas de sol, playa y piscina. Lo dice Nanas & Co. ¡Toma nota!
Rollitos de verduras y frutas envueltos en wraps de arroz.
Estos rollitos son muy versátiles y también se pueden hacer con pollo, pavo, gambas… si te apetece más salado que dulce. Para prepararlos, se necesitan obleas de arroz, es que se pueden adquirir en muchos supermercados y en cualquier tienda de productos orientales. Están hechas de arroz, harina de tapioca, agua y sal y son aptas para veganos e intolerantes. Prueba a mezclar todo tipo de vegetales con frutas exóticas como zanahoria con papaya verde. ¡Refrescante, sano y riquísimo!
Polos artesanales.
Hazlos con zumo de fruta natural y moldes. Mételos en el congelador... et voilà!
Pizza de sandía.
Corta la sandía en triángulos y decora por encima con yogur natural, frutas, chips de coco, chocolate puro…
Torti-fajitas.
Este plato les encantará a tus hijos. En lugar de utilizar tortitas comerciales llenas de harinas refinadas, haz una tortilla de huevo muy fina en una sartén antiadherente y rellena al gusto. Puedes utilizar alguna base de verduras de otro día e incluir pollo, atún, lacón, queso… Todo vale siempre y cuando sean proteínas magras.
Crema de verduras fría.
Puedes hacer mil combinaciones. Hierve tus verduras favoritas con un chorrito de aove, para después, salpimentar, triturar y degustar. Prueba a tomarlas frías en verano, además de ser una excelente y ligerísima opción, puedes llevarlas en tarros a tus jornadas maratonianas de sol y piscina.
Boles llenos de colores y antioxidantes.
Los poké bowls, tradicionales de la cocina hawaiana, son una forma divertida y creativa de comer saludablemente. Los ingredientes para preparar un poké pueden variar mucho, y podemos sentirnos libres de experimentar nuevos sabores. Siempre estará formado por una base, pescado crudo, un acompañamiento de verduras, frutas y/o semillas, y una salsa que, generalmente, suele ser soja.