¿Miedo a engordar en vacaciones? Te damos las claves para evitarlo
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Según apuntan especialistas en nutrición, en verano engordamos una media de tres kilos. Y es que, durante las vacaciones de verano, nos olvidamos de la rutina, cambiamos nuestros hábitos y el relax invade nuestras vidas. Pero es importante saber que, aunque parezca misión imposible, mantener la línea y seguir disfrutando de la gastronomía en vacaciones es una combinación factible.
Para demostrarlo, a continuación proporcionamos algunas recomendaciones para seguir una dieta sana y así evitar engordar o recuperar el peso perdido (y que tanto nos ha costado perder) durante los meses previos al verano.

Objetivo principal: mantenerse
En primer lugar, es importante ser realistas. El objetivo debe de ser sensato y acorde con la situación en la que nos encontramos, es decir, no podemos pretender bajar de peso en vacaciones, pero sí mantener lo que hemos conseguido gracias a la famosa “operación bikini”.
Además, no debemos utilizar la festividad como excusa para cambiar radicalmente los hábitos alimenticios, así como permitirnos algunos atracones. Por ejemplo, podemos comer helados de vez en cuando, pero no diariamente con motivo del calor y el buen tiempo.

La clave del éxito: moderación
La moderación es una de las claves del éxito para mantener el peso en vacaciones. Debemos evitar el todo o nada: ocio, vacaciones y festivo no equivalen a excesos, pero tampoco a lo contrario, ya que en un momento u otro acabaremos cayendo en la tentación.
Así pues, es fundamental entender que no existen alimentos prohibidos, pero que todos los excesos son malos y traen consecuencias negativas. Así pues, para ayudarnos en este tema, una recomendación es comer en platos de postre, recordando así la importancia de ajustar las cantidades.
Además, cabe destacar también la necesidad de frenar cuando ya estamos satisfechos, puesto que la tendencia es comer todo lo que nos ponen en el plato. Por lo tanto, si nos sucede esto en un restaurante, una buena opción es pedir que nos lo pongan para llevar.

La importancia del autocontrol
Sin duda, el verano es la época del año en la que más cambiamos nuestra rutina y más vida social tenemos. Sin embargo, esto no tiene que estar reñido con la disciplina, el orden o los hábitos alimentarios. Por este motivo, si antes de las vacaciones seguíamos un estilo de vida saludable, debemos seguir con las costumbres que teníamos en casa y mantener estos hábitos saludables.
Asimismo, realizar actividad física es básico para mantener el peso en verano. De hecho, las vacaciones también son un buen momento para practicar deporte allá donde nos encontremos, ya sea caminando por la playa, yendo al gimnasio del hotel o nadando en la piscina.
Permitirnos ciertos extras tampoco significa recaer en comportamientos alimentarios negativos (siempre y cuando lo hagamos con control). Hay que disfrutar del momento y recordar que el comer es un hecho social, por lo que nuestra actitud frente a este tipo de eventos sociales tiene que normalizarse.

Recomendaciones especiales para las comidas fuera de casa
Por un lado, no hay que olvidar que tenemos derecho a elegir las cantidades, así como que tampoco tenemos la obligación de comernos el plato entero. Asimismo, antes de ir a comer fuera, es recomendable hacer un tentempié un poco más abundante (por ejemplo, dos yogurts o una fruta) para no llegar con hambre y así pedir con moderación. Otro consejo es evitar los buffets libres, puesto que en este tipo de restaurantes tendemos a consumir más cantidad de la que debemos.
Y, por otro lado, si vamos a comer fuera de casa y cometemos algún exceso, debemos ser conscientes y compensar en el resto de comidas del día: fruta con yogurt desnatado, piña con jamón dulce, ensalada verde con atún natural o palitos de cangrejo.
Estrategias nutricionales
» Bebida: hay que priorizar la ingesta de agua, infusiones o tés fríos, así como escoger bebidas libres de azúcares añadidos y/o bajas en grasas para acompañar las comidas. En verano también podemos recurrir al café con hielo como bebida a media mañana o media tarde, en lugar de tomarnos una bebida azucarada.

» Aperitivos: escoger siempre opciones saludables como, por ejemplo: marisco natural o en conserva, jamón serrano, pepinillos, cebollitas… Además, es importante evitar los fritos. Si queremos reducir las porciones de alimentos ingeridos, podemos escoger un aperitivo o entrante como primer plato, puesto que, generalmente, tienen un tamaño más reducido que las opciones de primer plato.
» Primer plato: idealmente, debería estar compuesto por verduras. En verano es muy apetitoso empezar por una ensalada para sentirnos saciados fácilmente. Asimismo, es importante saber escoger bien las ensaladas, teniendo en cuenta los ingredientes y las salsas, porque no todo vale.

» Plato principal: si éste es de gran tamaño, podemos compartirlo. De lo contrario, podríamos optar por porciones reducidas o platos más pequeños.
» Postres: la mejor opción es la fruta fresca, macedonia o zumos naturales. Pero también podemos disfrutar de yogures o sustituirlos por tés o cafés directamente. Debemos evitar los dulces como tartas o los helados ya que son muy calóricos.
» El café: deberíamos sustituir el café o cortado por infusiones como la manzanilla, menta poleo o té verde, ya que facilitan la digestión en las sobremesas.
» Snack o tentempié: llevar nuestros propios snacks nos ayudará a comer entre horas cuando estemos fuera de casa, evitando así los snacks comerciales (que suelen contener más calorías, azúcares y sal). Algunas recomendaciones de tentempié son: las frutas o los vegetales frescos lavados y cortados, bocadillos de queso fresco, jamón york o pavo, humus o frutos secos sin sal.
En definitiva, antes de deleitarnos con cualquier alimento, siempre debemos pensar si el placer que nos va a producir aquello que estamos pensando en comer, que ya sabemos que no es lo mejor para mantener el peso, va a compensar el esfuerzo que hemos realizado durante todo el año. En caso de permitirnos algún capricho, que también es necesario en verano, siempre deberemos compensarlo con el resto de las comidas del día.

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